lunes, 30 de diciembre de 2013

Mantecados La Colchona (Sevilla)

La casa de mantecados más antigua de Estepa. Desde 1850 endulzando paladares sin empapuzar, lo que hablando de polvorones ya es mucho. El negocio surge cuando la señora Doña Micaela, que se dedicaba a la matanza del cerdo en este pueblo sevillano, decide aprovechar la manteca sobrante para hacer mantecados. Una idea innovadora que hoy hubiera recibido un premio a la sostenibilidad y a la mujer emprendedora.

Las calidades son medias al igual que los precios medios en los surtidos. Destacable su mantecado casero. También venden tabletas de chocolate, muy bueno por cierto, pero me sentí engañado cuando me dijeron que era de producción propia y al degustarlo pude comprobar que era el “Santocildes” de toda la vida. Mis padres son leoneses, puedo identificar este chocolate con los ojos cerrados... cada vez que visito León compro varias tabletas y por cierto, a mitad de precio que te lo venden en La Colchona. Convendría vigilar esos detalles.

 Bolsa de mantecados caseros de La Colchona

 Fachada de La Colchona en la calle Cuna

Placa dedicada a Doña Micaela

Mantecados La Colchona
Calle Cuna, 37
41004 Sevilla

Horchatería La Fábrica de Siempre (Madrid)

ESPECIAL HORCHATA: Me chifla la chufa (IV) 

Un trozo de Valencia en la capital del Estado pero sin políticos corruptos, chanchullos urbanísticos ni obras inconclusas. Fundada en 1945 es oficialmente la horchatería más antigua de Madrid. Un negocio de toda la vida con decoración valenciana en la que no faltan recuerdos para el Madrid de siempre y sus protagonistas como el cartel de la barra obra del dibujante de la transición José Ramón Sánchez o un recuerdo de la ilustre visita del alcalde don Enrique Tierno Galván. 

Horchata de categoría y precios de barrio. A pesar de vivir en el otro extremo de Madrid no falto a mi cita con esta horchatería ningún verano. Como el paseo desde mi casa es de aúpa aprovecho para tomar una horchata grande como en la foto y pensando en el regreso la acompaño de su deliciosa coca a modo de barrita energética no vayan a abandonarme las fuerzas. Un negocio imprescindible en Tetuán y una rareza en estos tiempos de franquicias impersonales.


 Horchata en vaso de medio litro
     
Horchatería de toda la vida en el barrio de Tetuán
 
Tarjeta de La Fábrica de Siempre
  
Horchatería La Fábrica de Siempre - Oroxata
Calle de Villaamil, 44
28039 Madrid



Localización en mapa de las horchaterías y otros establecimientos que elaboran horchata natural incluidas en la sección ESPECIAL HORCHATA: Me chifla la chufa

Horchatería Alboraya (Madrid)

ESPECIAL HORCHATA: Me chifla la chufa (III) 

Aquí comenzó todo. A mí no me gustaba la horchata hasta que mi amiga Beatriz me descubrió la fresca en este mítico establecimiento que nada tiene que ver con la embotellada con aditivos tipo Chufi. En este local también probé mi primera agua de cebada, tan castiza como la zarzuela y que hoy cuenta con el mismo número de seguidores. Su leche merengada tiene fama de ser también una de las mejores de la ciudad. Los helados son más normales pero sin dejar de ser artesanos.  

La tienda de la calle Alcalá tiene su origen en 1980 pero la familia propietaria está relacionada con el cultivo de la chufa desde los años sesenta.  Tienen otra tienda más nueva al lado del Palacio de los Deportes con una terraza despejada de tráfico. Si sumamos a estos dos establecimientos el cercano Kiosko de Miguel y José en la calle Narváez nos situamos en el epicentro del Madrid más horchatero. La Horchatería Alboraya dispone de horchata siempre salvo cuando cierran en enero, de ahí la expresión "cuesta de enero". 
 
 ¡A la rita horchata fresca!
 
 Una horchatería en plena calle de Alcalá
  
Tarjeta de Horchatería Alboraya
  
Dos establecimientos
 
Calle de Alcalá, 125
28009 Madrid

 
Avenida Felipe II, 26
28009 Madrid


Localización en mapa de las horchaterías y otros establecimientos que elaboran horchata natural incluidas en la sección ESPECIAL HORCHATA: Me chifla la chufa

Mesón La Troya (Trujillo)

La teoría de los seis grados de separación del húngaro Frigyes Karinthy asegura que todos los habitantes del planeta estamos conectados de algún modo. Para probar su veracidad intenté sin éxito tirar de todas mis amistades y las amistades de mis amistades para ver si alguien lograba presentarme a Scarlett Johansson. Y no, no funcionó (¡snif!). Pero durante el proceso lo que logré fue conocer a una tropa de amigos de mis amigos que cuando se referían a Trujillo aseguraban haber comido en La Troya y además, lo recomendaban.

Mi experiencia allí fue una decepción. Es sólo recomendable para los que priorizan cantidad a calidad. Cantidades ingentes de comida para tragaldabas insaciables en lo que parece un intento de epatar al comensal. Dicen que la comida entra por los ojos pero en este caso se te sale por las orejas. Sería un establecimiento perfecto para un capítulo doble de "Crónicas Carnívoras" que podría, de hecho, ser el último del intrépido presentador si es capaz de comer todo lo que le ponen sobre la mesa, Alka-Seltzer no incluido.

Fachada de La Troya

Pizarro se retira de La Troya incapaz siquiera de dar fin a los entrantes


Sin fotos de platos por no disponer de cámara panorámica

Mesón La Troya

Plaza Mayor, 10
10200 Trujillo

Turrones Alfredo Mira Monerris (Santander)

Actualización 23/07/2018


Hay gente que en los viajes visita catedrales, museos, estadios de fútbol, pero será cuestión de gustos: yo soy más de turronerías. Planifico con antelación la visita a una ciudad por si dispone de uno de estos establecimientos. Tras una primera parada en Torrelavega, descubrir lo bonita que era Santander fue un alivio solo comparable a comprobar que los santanderinos no son tan locuaces como Miguel Ángel Revilla. Y de Santander ningún monumento me impactó tanto como cuando en Turrones Monerris degusté el mejor turrón de avellana del universo. Desde entonces no pasa un año sin que llegue un pedido a mi casa.

La historia de esta turronería comienza en aquellos gloriosos tiempos cuando los jijonencos se repartían las ciudades donde comerciar sus productos. En 1893 Francisco Monerris y su hermano Enrique fijan su destino en la entonces próspera Santander. Sus descendientes ofrecen en la actualidad helados en verano y turrones en invierno, al exigente público santanderino. Los turrones, tortas, mazapanes, garrapiñadas o panes de Cádiz elaborados con la mejor almendra marcona nacional siguen llegando, como marca la tradición, de su obrador de Jijona para privilegio de todos los santanderinos y de todo aquel que haga su pedido porque reparten a toda la península. ¡Bien!


 El espléndido turrón de avellana de A. M. Monerris

 Polvorones selectos Monerris
   
Tríptico con información sobre helados Monerris

Turrones Alfredo Mira Monerris


Calle Amós de Escalante, 8

39002 Santander

Plaza del Cuadro, 2

39004 Santander

Confitería Ramonín (Ribadesella)

Asturias es un paraiso para los golosos. Me llevé una pequeña decepción cuando descubrí que la pastelería más afamada del pueblo era una bombonería repija para turistas. No podía imaginar que a estas latitudes habrían llegado los típicos negocios atrapaguiris de las grandes ciudades y destinos turísticos del Mediterráneo. La suerte fue descubrir esta confitería de toda la vida donde recomiendo tomar para el desayuno su delicioso bizcocho casero acompañado de un cafetito. No imagino mejor manera de cargar las pilas antes de encaminarse a descubrir las maravillas de esta localidad y todo su concejo. Si es cierto como dicen los gurús de la dietética que el azúcar mata mi cementerio de elefantes será esta pequeña confitería.


Fachada de Confitería Ramonín en Gran Vía de Agustín Argüelles
 
Tarjeta de Confitería Ramonín


Confitería Ramonín 
Calle Gran Vía de Agustín Argüelles, 49
33560 Ribadesella

Los turrones de los Ivánez (Bilbao)

Actualizado 23/08/19

Hay ciudades feas, normales, bonitas y las que tienen turronerías. Bilbao tiene turrón y del bueno. Si eres de los inconscientes que cuidan su dieta anímate a probar su Jijona, luego si quieres bájalo subiendo al Artxanda, remando por la ría o corriendo delante de la ertzaina, pero no olvides probarlo.

Una canción conocida entre las cuadrillas cuenta la historia de un inglés que vino a Bilbao y “ya no se quiso marchar”. En el improbable caso que un día los chiquiteros sustituyan el vino por la horchata podrían dedicársela a los Iváñez. Su vinculación con la ciudad comienza hacia 1850 cuando Miguel Galiana llegó desde Jijona con su carro cargado de turrones por Navidad (cuándo sí no). El producto se vendía en los portales de las calles Correo y Bidebarrieta. Al precursor le sucedió su yerno Eladio Iváñez y así hasta hoy.

Gracias a esa familia para mí Bilbao es sinónimo de buen turrón. Descubrí su increíble Jijona en mi primera visita a la capital vizcaína hace un porrón de años cuando el ariete Aritz Aduriz todavía era alevín. Desde entonces no puedo irme de la ciudad sin hacerme con un buen botín. Es tal mi habilidad para aprovechar hasta el último resquicio de mi maleta para llenarla de tabletas que podría asesorar a la Ertzaintza para descubrir los fajos de los “muleros” en el Aeropuerto de Sondica.

Con el paso de los años el portal ha sido sustituido por sendas tiendas a pie de calle y la estacionalidad navideña por una venta durante todo el año. Los dos establecimientos se sitúan en diferentes números de la emblemática calle Correo. A los turrones y otras especialidades jijonencas se le ha añadido helados y, por supuesto, horchatas que se elaboran en los obradores independientes que tienen en Alicante.

 
Foto de archivo de una tableta de Jijona
 
 Productos de Adelia Ivañez
 
Fachada de Turronería Iváñez
 
Adelia Ivánez
Calle del Correo, 12
48005 Bilbao

Turronería Ivañez
Calle del Correo, 23

Manolo Blas (León)

Cada vez hay más leoneses que me aseguran un déficit creciente en cuanto a opciones para comer en su ciudad. Al principio no les hacía mucho caso porque pasaba sólo unos días y me ponía gocho a tapas. En los últimos tiempos he pasado temporadas más largas en León y es cierto que cada vez cuesta más encontrar una buena casa de comidas, con cocina tradicional y a un precio razonable. Algo que me resulta chocante porque la gastronomía leonesa es excelente, tiene productos de aúpa y digo yo que cocer un simple botillo no lleva tanto trabajo.
La razón puede encontrarse en que la tapa es menos laboriosa y tiene su público. En algunos de estos bares de tapas es difícil encontrar raciones y platos destacables. En Manolo de Blas comí las peores croquetas de León y reinos circundantes. Con el aceite que soltaban se podrían haber engrasado todas las puertas del Castillo del Conde Drácula. Tan aceitosas que la foto me salió emborronada. Merecedor de un capítulo doble de Pesadilla en la Cocina. Dicen que lo mejor del establecimiento son las patatas. No lo sé, la verdad es que me quedé sin ganas de probar nada más. Tendré que seguir buscando.
 
Fachada de Manolo Blas en calle Capitán Cortés

 Cierre del local
  
Detalle


Manolo Blas
Calle Capitán Cortés, 5
24001 León

viernes, 27 de diciembre de 2013

Taberna Los Coloniales (Sevilla)

Parada en el hispalense barrio de Encarnación-Regina. Un sevillano nos recomienda este establecimiento que a comienzos del siglo pasado era una tienda especializada en productos coloniales, es decir, ultramarinos, mucho antes de la desgraciada irrupción del reggaeton. En 1994 “Los Coloniales” inicia una nueva etapa como taberna de manos de Eugenio García con tapas de calidad y buenos precios.

El negocio dispone de barra, pequeño salón y terraza. El servicio es rápido y eficiente. Puedes elegir entre tapa, media o ración pero para que te hagas una idea dos súperwelter con cuatro tapas pueden comer estupendamente. Recomendamos el pollo con salsa de almendras y los calamares del campo. La única pega son sus aburridos postres, pero hay que decir que Sevilla no se encuentra en mi lista de ciudades imprescindibles para golosos. Disponen de otro local más grande y con menos encanto en las inmediaciones de la catedral.

Calamares de campo (no busques el bicho)

Taberna Los Coloniales

Interior de la Taberna Los Coloniales en Plaza Cristo de Burgos 
 
Plaza Cristo de Burgos, 17
41003 Sevilla


Calle Fernández y González, 38
41001 Sevilla

Las horchatas de la familia Mira (Málaga)


La historia de la familia Mira en Málaga tiene su origen en un viaje en burro de Severino Mira desde su Jijona natal para vender turrón. Quién iba a decirle a Severino que sus biznietos seguirían endulzando el paladar malagueño con turrón, horchata, mantecado, helados y otras delicias de la casa tantos años después. Tras el éxito de la primera expedición el burro dio paso a un carro para finalmente en 1890 abrir el despacho de la calle Nueva con el nombre de “Horchatería Valenciana”. La única interrupción del negocio fue la guerra civil durante la cual el local se convirtió en sede de la CNT. En los años sesenta comienza la expansión del negocio con la apertura de nuevas tiendas. Desde 2001 las tres ramas de la familia administran negocios independientes.

Casa Mira 1890

Disponía de varios establecimientos. En su mítico despacho de la calle Nueva tuve la oportunidad de disfrutar de mi primera horchata de la familia Mira. Era mi primer viaje a Málaga, descubrí casi por casualidad esta horchatería y me encandiló tanto que tras traspasar su puerta no recuerdo haber echo nada más en la ciudad. Cuando anuncié mi regreso a Madrid la dependienta me obsequió con una barra de turrón de Alicante, una semana más y creo cuelgan un retrato mío junto al de Severino. No podré repetir visita para mi desconsuelo porque Casa Mira 1890 cerró sus puertas en 2016.
 
 
Fachada de Casa Mira 1890 en Calle Nueva
 
 Tableta de Turrón de Jijona de Casa Mira 1890
 
Casa Mira 1890
Calle Nueva, 16
29005 Málaga

Heladería Casa Mira

Si una rama familiar gestionaba el primer local familiar de la calle Nueva otra rama hace lo propio con el no menos famoso local de la calle Larios. Fue en esta céntrica calle malagueña donde los Mira pusieron sus ojos para instalar tras la guerra civil su segunda tienda en Málaga el año 1943, si bien en una ubicación diferente a la actual. No fue hasta algunos años después cuando se trasladaron en la misma calle en su vigente emplazamiento. Imposible no recorrer esta gran vía malagueña sin tropezarse con las largas colas que se forman para disfrutar de sus horchatas, helados y granizados.

 Horchata
 
Interior de Casa Mira
 
Heladería Casa Mira
Calle Marqués de Larios, 5
29015 Málaga

Fernando Mira Monerris

Bajo su denominación está la otra rama familiar que gestiona tres de las cuatro establecimientos que permanecen abiertos en la actualidad de la familia Mira. En este caso han apostado por una actualización del concepto heladería pero sin renunciar a la elaboración tradicional. Un ejemplo es la transformación del local de la calle Compás de la Victoria inaugurado en 1975 que se ha convertido en el buque insignia de lo que quiere la empresa. Su renovada gran barra de aspecto clásico es un buen lugar para disfrutar de buenos helados, una gran horchata y un excelente blanco y negro.

 Horchata
 
Barra
 
Fernando Mira Monerris

Calle Andrés Pérez, 10
29008 Málaga

Compas de la Victoria, 1
29012 Málaga

Calle Marqués de Valdecañas, 2
29008 Málaga

Plaza Pío XII, 6
29007 Málaga

Localización en mapa de las horchaterías y otros establecimientos que elaboran horchata natural incluidas en la sección ESPECIAL HORCHATA: Me chifla la chufa

Confitería Aparicio (Málaga)

Actualización 05/12/2020
 
Corren tiempos de panaderías y pastelerías de aspecto pijo: alicatados en blanco hasta el techo, mesas con maderas estilo nórdico y extensas cartas de panes precocinados y bollería supuestamente artesanal y con más grasas trans que el más industrial de los Phoskitos. La ciudad de Málaga tampoco se libra. Hoy en día encontrar un negocio con el título “pastelería” no es garantía de calidad en ningún sitio. En cambio por el motivo que sea todavía asocio “confitería” con la esperanza de encontrar algo auténtico y que en el caso de Confitería Aparicio se cumple a rajatabla. Tampoco lleva a engaño su lema: “el sabor antiguo”.

Confitería Aparicio fue fundada por Alfonso Aparicio en el barrio de Capuchinos en 1941. Antes había sido encargado de la Confitería Imperial en la calle Nueva que todavía recordarán los más viejos del lugar por su carrito de reparto. Trabajan maravillosamente el hojaldre y sus rellenos de cabello de ángel son de los mejores que he probado. Aunque si hay algo que recomiendo de esta pastelería sus roscos de vino. Este confite es el típico que siempre queda triste y secuzo en los surtidos de Navidad. Puede que por ello siempre haya despertado en mí simpatías y no haya cejado en el empeño de redimirlo de tan solitario destino. Aquí lo han conseguido con creces. Dulce, firme pero jugoso, aromático, sabe a auténtico vino de Málaga. Elaborado para satisfacer al más recalcitrante de los abstemios

Dulces artesanos

253593. Viejo local cerrado por la renta antigua

Caja de cartón de Confitería Aparicio
  
Confitería Aparicio:

Calle Santa Lucía, 20
29008 Málaga


Calle Calderería, 11
29008 Málaga

Paseo de Reding, 16
29016 Málaga

Plaza Capuchinos, 15
29014 Málaga

Teléfono para envíos a domicilio: 952253593 

Horchatería El Siglo (Valencia)


Este verano fui un fin de semana a Valencia. Como ya me conocéis y hay confianza os confesaré que mi intención no fue refrescarme en sus playas sino recorrer todas las horchaterías de la ciudad en una orgía de chufas. ¡Lo sé, la carne es débil! Para hacer sed dediqué el resto del tiempo a hacer algo de turismo... Después de descubrir que la Ciudad de las Ciencias es un enorme absurdo que no dispone de ninguna sombra pude recuperar el ánimo, incluso cierta esperanza en el ser humano, en esta horchatería donde sus empleados me hicieron sentir como en casa.

El Siglo lleva cuatro generaciones sirviendo horchata. Se inauguró en 1836, un año de chufas por doquier: La Batalla del Álamo, el Sitio de Bilbao… Coetáneo a otros negocios legendarios vivos valencianos como Casa Montaña (1836), Sombreros Albero (1820) o Librería Anticuaria Rafael Solaz (1850) tiene el honor de poseer la distinción de ser la horchatería más antigua de la ciudad de Valencia.

Además de la horchata su especialidad es su crema de chufa. Me advierten: “Por su intenso sabor solo apto para los muy chuferos”. Esa amonestación tiene en mi persona el mismo efecto que aconsejarle a uno de Bilbao que después de las pochas es mejor pedir el chuletón para compartir. Su sabor es como meterse un puñado de chufas en la boca pero con una textura fresca y mantecosa y, por supuesto, desde entonces esta horchatería legendaria es una visita imprescindible en mis viciosas visitas a Valencia.
 
Fachada de Horchatería El Siglo en Plaça de Santa Catalina

Su exclusiva crema de chufa
 
Tarjeta de Horchatería El Siglo
 
Horchatería El Siglo
Plaça de Santa Catalina, 11
46001 Valencia

-------------------------------------
Actualización 25/03/2015

El fin de las rentas antiguas ha liquidado a esta institución, pena que el edificio de las Corts no sea también de alquiler...  

-------------------------------------
Actualización 01/12/2015 

La horchatería se mantiene cerrada. 


-------------------------------------
Actualización 22/01/2018



La nueva actividad sólo conserva la fachada. Su hermosa decoración interior con cerámica valenciana ha sido demolida. La intervención tiene tan poco sentido como querer comprar el Palacio del Marqués de Dos Aguas para abrir el nuevo "MediaMark Dos Aguas". 

Requiescat in pace.
 

Localización en mapa de las horchaterías y otros establecimientos que elaboran horchata natural incluidas en la sección ESPECIAL HORCHATA: Me chifla la chufa

Mercado de Colón (Valencia)

Fenomenal ejemplo de arquitectura modernista. Si decides  visitarlo no olvides la cámara fotográfica porque es un gran edificio, sin embargo la billetera puedes dejarla en el hotel. Cuatro establecimientos fríos, insustanciales y pijos. Tengo dudas a la hora de calificarlo de "mercado", como ocurre con el aeropuerto de Castellón lo es sólo de nombre. En la línea de los mercados que están surgiendo poco a poco por todo el país pensados para pijos y turistas en detrimento de los vecinos.
 
Una pena porque el mercado tradicional es un elemento vertebrador de nuestros barrios. El cercado barrio de Ruzafa mantiene el suyo y con ello toda la actividad que genera, que no es sólo comercial. Los gastromercados atraen a turistas pero con ellos también a carteristas y otros amigos de lo ajeno atraídos por la víctima fácil. Si tienen alguna duda pueden preguntarles a los vecinos del madrileño Mercado de San Miguel que tras su transformación han perdido un servicio público pero también tranquilidad y seguridad.  
 
Edificio modernista declarado Monumento Nacional

Cerámica policromada de estilo regionalista

Escasa vida comercial bajo la preciosa estructura metálica

Mercado de Colón
Carrer de Jorge Juan, 9
46004 Valencia