martes, 2 de enero de 2024

Ruta por los obradores del mazapán toledano

Pocas cosas definen tanto a un municipio como su dulce típico y aquellos que carecen de uno deberían tenerlo por imposición legal. Estoy tan convencido de ello que si de mí dependiera incluiría en la Ley Reguladora de las Bases del Régimen Local que los municipios de más de cinco mil habitantes además de parque, biblioteca y tratamiento de residuos dispusieran por norma de un dulce característico del lugar. Algunos diréis que no es un servicio público necesario pero tampoco lo es el museo etnográfico que seguro también tiene tu pueblo con un fondo compuesto por aperos y trastos que puedes encontrar en cualquier rastrillo.
 
Toledo tiene dulce y es archiconocido: el mazapán. Esta elaboración horneada compuesta por almendra y azúcar a partes iguales es junto a la carne de caza y las espadas su seña de identidad. El problema a la hora de comprar estos productos típicos es acertar. El cliente medio en Toledo es el “turista de libro”, un consumidor sin formación y con poco tiempo para comparar víctima fácil del tendero experto en el “gato por libre” en forma aquí de carne de res por ciervo, acero chino por damasquinado y mazapán industrial por artesano. Debes saber que a pesar de los innumerables locales que ofrecen mazapán artesano Toledo solo tiene cuatro obradores.
 
Acudí a Toledo para comprar en los únicos tres obradores ubicados en el centro. En cada uno de ellos compré figuritas de mazapán por ser éstas las más significativas. Ya en casa organicé una cata a ciegas con todos mis amigos aficionados a la almendra para elegir nuestro obrador favorito. La muestra es muy pequeña, no usamos un método científico aprobado por los fabricantes de mazapanes de Toledo y el resultado aún siendo honesto no espera ser concluyente. Todos los que hemos participado en este artículo nos damos por satisfechos si en tu próxima visita a la ciudad de las Tres Culturas puedes disfrutar de buen mazapán de obrador.

El objetivo de la ruta

El Foro de Toledo
 
Comenzamos nuestra ruta por el más antiguo de Toledo. Su origen se remonta a 1806 cuando Juan Sánchez Aguilera compra una tienda con obrador de confitería en la Plaza Zocodover. Hoy San Telesforo dispone de dos establecimientos: un local enorme en la Plaza Zocodover con una terraza en la que sus camareros reparten más sablazos que Uma Thurman en “Kill Bill” y cerca de éste otro más pequeño en el comienzo de la cuesta del Alcazar.
 
Poca presencia de los productos de su pastelería. No se libra de la mala primera impresión el mazapán. Las paliduchas figuritas son tan poco apetecibles como una cita con la Novia Cadáver. Decidí hacer la cata a ciegas para que su aspecto no condicionara negativamente la valoración gustativa. Camuflaje que no evitó unánimes malas críticas. Textura áspera con presencia de granos de azúcar, escaso sabor a almendra para lo que se espera del mazapán y regusto dulzón más propio de una “chuche”.
 
Nota: Suspenso

Fachada de Zocodover

Algunos productos

Mi compra

Obrador de Mazapán Santo Tomé
 
Tiene su origen en 1856 cuando un repostero con formación europea llamado Eleuterio Pérez abre un obrador en un viejo caserón del XVII. Siglo y medio después ese viejo obrador continúa regentado por la misma familia. Disponen de cuatro tiendas en Toledo siendo la de la calle que le da nombre la más conocida. Su mazapán es el más conocido de la ciudad. Figuritas apetecibles como también lo son otros productos de los exhibidores que incorporo a mi cesta.
 
En la cata a ciegas todos coinciden en situarlo en primer lugar. También existe coincidencia en señalar que es el mazapán de textura más consistente, con más sabor a almendra y un agradable punto final a tostado. Pidieron repetir pero les recordé que no estaban invitados a una merienda sino a una cata. También triunfaron las pastas de piñones y las princesitas también conocidas por marquesas adquiridas en el mismo establecimiento.
 
Nota: Notable

Interior

Mazapán delicia

Mi compra

Obrador Mazapanes Conde
 
Me adentro en la judería para visitar el último obrador de nuestra lista. Se encuentra localizado en un inmueble de origen medieval llamado La Tahona de la Higuera. En este edifico histórico se elaboran estos mazapanes desde 1982. No es una tienda convencional sino un obrador con venta directa al público. Aunque sus productos se encuentran en algunas tiendas de la ciudad recomiendo desplazarse hasta allí para beneficiarte de precios más económicos.
 
Es una gozada poder adquirir los mazapanes en el despacho del mismo obrador. Figuritas con buena presencia en general. Las que yo compro resultan ser las más tostadas de la ruta. Evito emplear para la cata algunas torradas en exceso. Mis invitados destacan la jugosidad de las mismas. En cuanto al sabor todos las sitúan en el segundo lugar pero con notables diferencias, mientras para uno son casi tan buenas como las de Santo Tomé para el resto son sólo un poco mejor que las de El Foro.
 
Nota: Bien

No te despistes

Mazapán surtido

Mi compra


Direcciones:

Plaza de Zodocover, 8
45001 Toledo

Calle de Santo Tomé, 3
45002 Toledo

Plaza de Valdecaleros, 8
45002 Toledo