viernes, 25 de agosto de 2017

Mercado de Verónicas (Murcia)

La fama de la huerta murciana viene de lejos. Los amoríos de la zarzuela “La alegría de la huerta” se ambientan en Murcia entre lechugas, pimientos y calabacines. Se estrenó en el madrileño teatro Eslava y su éxito fue de tal magnitud que el título de la obra dio origen a la expresión popular que todos conocemos. No se volvieron a ver tantas frutas y verduras sobre un escenario hasta la representación en los noventa de “Los Fruittis: el musical”… hito de lo prescindible en el panorama dramático nacional.

Para aprovisionarme de frutas y verduras durante mi visita a Murcia me doy una vuelta por  el Mercado de Verónicas de estilo modernista y obra del murciano Pedro Cerdán, autor también de la no menos impresionante fachada del Casino en la misma ciudad. El mercado centenario merece por sí solo una visita pero además dispone de una planta entera dedicada a frutas, verduras y hortalizas. Otra opción de aprovisionamiento es acudir directamente al campo murciano pero en agosto es preferible no hacerlo sin la indumentaria aconsejada para estos menesteres...

Hortelano recogiendo chirimoyas

En la segunda planta del mercado hay una docena de puestos con verduras de la huerta murciana y frutas de hueso de la Vega del Segura. Presta especial atención a variedades autóctonas como el tomate de caña Flor de Baladre, la calabaza totanera, el melocotón amarillo de Cieza, la pera de Jumilla o el melón del Campo de Cartagena. Visita esta planta incluso si no te gusta lo verde porque puede ser tu último lugar para aprovisionarte de agua y fruta para el camino y no morir deshidratado antes de llegar a la estación.

Detalle del mercado
  
Toda la huerta murciana en una planta

Fachada del Mercado de Verónicas
  
Calle Plano de San Francisco, 10
30004 Murcia

lunes, 21 de agosto de 2017

Cal Xixonenc (Montblanc)


La leyenda catalana sitúa el capítulo protagonizado por San Jorge y el dragón en la ciudad tarraconense de Montblanc. Otros puristas aludirán que esta acción tuvo lugar en Líbano y que esta versión es pura heterodoxia o cosa de la Asamblea Nacional Catalana. La realidad es que la tradición no es nueva y que queréis que os diga, a mí no me cuesta nada imaginar a San Jorge galopando a lomos de su caballo por las empedradas calles de esta bonita ciudad medieval. Por otro lado si se veneran diecisiete cabezas de San Juan Bautista repartidas por iglesias de medio mundo decirme por qué este santo no podría haber matado dragones en varias ciudades a la vez. Y si no, ahí tenéis Juego de Tronos.

Si entre tanto trote, espadazo y quemadura de tercer grado te ha entrado sed puedes visitar en Montblanc “Cal Xixonenc”, una heladería que abrió sus puertas en agosto de 2001. Su propietario procede de la tradición heladera de “Los Jijonencos”, la mítica heladería de Valls, municipio famoso por sus calçots, y donde “Cal Xixonenc” elabora horchata con auténtica chufa valenciana de Alboraya. Tenía previsto visitar Valls para probar sus calçotadas pero ahora tengo un doble motivo: calçots y horchata. Mientras disfruto una rica horchata en Montblanc imagino como sería mojar calçots dentro de un vaso de  horchata. Eso sí que es heterodoxia y lo demás son chorradas.


Una horchata en Montblanc

Fachada de Cal Xixonenc

Interior del local

Cal Xixonenc

Carrer Major, 52
43400 Montblanc 

Localización en mapa de las horchaterías y otros establecimientos que elaboran horchata natural incluidas en la sección ESPECIAL HORCHATA: Me chifla la chufa


viernes, 18 de agosto de 2017

Mercado de Abastos (Pontevedra)

Se va a reformar el Mercado de Abastos de Pontevedra. Me echo a temblar cuando oigo que un Ayuntamiento quiere regenerar sus mercados. Tras las iniciales promesas y buenas palabras de los políticos en ocasiones se esconden planes de demolición de la actividad en toda regla. Todavía recuerdo la expulsión de los tenderos del Mercado de San Miguel para convertirlo en un establecimiento donde finolis y hipster comen ostras y esferificaciones a costa de que los vecinos tengan que ir a comprar el jamón cocido al Opencor más cercano.

Madrid repitió operación con el de San Antón para disfrute de la “gentry”, el turisteo y esa falsa clase media que se siente tan bien bajo el letrero “gourmet”. Si no prosiguieron con otros fue porque la crisis cortó el grifo (no hay mal que por bien no venga). Hoy los vecinos de esos barrios carecen de mercado tradicional salvo que alguna abuela consiga estirar la pensión y haya logrado sustituir la carne picada del carnicero de confianza por bandejas de buey de Kobe.

¡Calla, ho, diez euros por una lata de fabes!

En proceso de renovación se encuentra el Mercado de Abastos de Pontevedra. Levantado en 1948 sustituyó al anterior mercado cubierto de finales del XIX. Es obra de Emilio Quiroga Losada, hermano de Manuel, el insigne violinista pontevedrés famoso en medio mundo. Este arquitecto municipal es autor de otras obras en la ciudad como la Caja de Ahorros Provincial o el edificio Baltasar.

La idea del Ayuntamiento es bajar los puestos de frutas y verduras a la planta de la calle donde se encuentran los de pescado, carne y flores para ocupar la planta alta con puestos de comercio de cercanía, ecológicos y una zona para “picoteo”. No está previsto un “Gadis” ni un “gastromercado” pero ¡quién puede fiarse de un político! Estaremos atentos para que no nos den "gato por liebre"…


Exterior del Mercado de Abastos pontevedrés

Uno de los puestos obligado a desplazarse

Los lunes paran las pescaderías

Mercado de Abastos
Calle La Sierra, 5
36002 Pontevedra

lunes, 14 de agosto de 2017

Heladería Italiana Napoli (Madrid)

Una táctica de las franquicias es fijar establecimientos cerca de comercios del mismo ramo para arrebatarles sus clientes. Esta suerte de “contraprogramación” ha llevado al cierre de muchos comercios tradicionales. Una de las franquicias acusadas de estas prácticas es “Granier”. En la Avenida Ciudad de Barcelona y a unos pasos donde estuvo la ya difunta confitería “La Cervantina” una pizarra de tijera a la puerta de un establecimiento de esta cadena ofrece el económicamente imbatible “dos fartons más horchata por 2,50 euros”. Los reyes del cruasán industrial a precio de saldo se pasan sin contemplaciones a la competencia desleal de la chufa y observo con horror a través del cristal a niños sorbiendo horchatas industriales. No entiendo que se monte la de Dios si te olvidas a los críos en el coche en verano pero no por permitir que consuman semejante brebaje. De aquí a volver al “Tang” solo hay un paso.

Si eres uno de esos padres y no quieres ser merecedor de compartir celda con narcotraficantes, asesinos o aún peor, licitadores de obra pública, aún estás a tiempo. Sólo tienes que sacar a tus hijos del "Granier", cruzar la Avenida Ciudad de Barcelona y entrar a “Helados Italianos Napoli”. Descubrí esta heladería hace algunos años mientras repasaba con el maestro heladero de “Los Alpes” establecimientos que en Madrid elaboran horchata natural. Desde entonces no falto cada verano a mi cita con esta heladería de Retiro. “Napoli” comienza su andadura en 1973 con una tienda en el barrio de San Diego que hoy es su obrador y del que salen entre marzo y octubre doscientos litros semanales de horchata elaborada sólo con chufas D.O., agua, azúcar y rama de canela. Otra opción para tomar una horchata en la zona (Retiro-Salamanca) más “chufera” de la capital. 

Horchata de "Heladería Italiana Napoli"

Interior de la heladería

Objeto cedido por el Museo Warren

Avenida de la Ciudad de Barcelona, 19
28007 Madrid

Localización en mapa de las horchaterías y otros establecimientos que elaboran horchata natural incluidas en la sección ESPECIAL HORCHATA: Me chifla la chufa

miércoles, 19 de julio de 2017

Bar ESTIU (Alicante)

No es Madrid ciudad de buenas arrocerías. Algunas de las “auténticas” abusan de oropeles en forma de mantelería de hilo y profusión de copas, imponen conceptos obsoletos como el “servicio de mesa” y una recargada decoración en la que no faltan los orgullosos retratos del propietario con los protagonistas de la trama Púnica y el famoseo televisivo de los años 80. El resultado: arroces que no son para tirar cohetes (o mascletás) con una cuenta más hinchada que una obra de Calatrava. La tragedia del madrileño aficionado al arroz, salvo honrosas excepciones, es vivir atrapado en el limbo entre un “Paellador” o pagar arroz de verdad a precio de mariscada.

Acudo a Alicante para realizar una entrada sobre horchatas así que no tengo excusa para no disfrutar de un buen arroz. Para ello huyo del Paseo de la Explanada, que en cuestión gastronómica tiene más peligro que McGiver encerrado en una ferretería y acudo a la periferia, en concreto al barrio de Polígono Babel, para disfrutar de los arroces de “L´Estiu”. Este bar de barrio tiene justo lo que busco: pagas por lo que comes. Dispone de una gran variedad de arroces: de tacos de atún y sepionet; de bacalao fresco, habitas baby y ajo tierno; de setas, pato confitado y foie; cordero y romero…

Muy recomendable su “arroz en movimiento”: el tradicional arroz negro con sepia en este caso coronado por “katsuobushi”. Estas lascas de atún secado, fermentado y ahumado proceden de la cocina japonesa y tienen la cualidad de “bailar” al entrar en contacto con el vapor. Además de por la sugerente coreografía la presencia de este ingrediente en el arroz está plenamente justificada por el potente sabor que aporta. Un ejemplo del espíritu de tradición y fusión de este pequeño local de barrio.

Cruzo los dedos para que en su próxima reforma para ganar mesas no pierda su identidad de tasca.

Tasca moderna e informal

En el barrio de Polígono Babel

Arroz en movimiento

Calle Perú, 13
03008 Alicante

viernes, 14 de julio de 2017

Horchaterías Los Valencianos (Albacete)

ESPECIAL HORCHATA: Me chifla la chufa (XXVIII)

La historia de “Los Valencianos” es la de tantos horchateros y heladeros. Damián Francés Albero y Josefa Gimeno Sánchez llegan a Albacete en 1941 desde Gandía para probar suerte en su popular feria y la buena acogida les anima a establecerse al año siguiente. Sus carritos compitieron con los de “Helados José Quesada”, “El Buen Gusto Hnos. Rueda”, “Helados Pepe Gómez” y “Helados La Estrella”. Damián y Josefa llegaron a tener siete carros en Albacete. Por aquel entonces bien se podría haber popularizado la frase: “Albacete, una horchata y vete” pero parece que la rima no cuajó y tomó la actual deriva escatológica.

La segunda generación, José Francés Gimeno y Teresa Ferre Blanquer trasladan en 1990 el obrador de la calle Feria esquina con Doctor Ferrán al Polígono Industrial de Campollano y se funda FRANFER, que como es natural es el acrónimo de sus apellidos. En la actualidad al frente del negocio se encuentra la tercera generación que cuenta con cinco tiendas en Albacete y desde 2014 un "Museo del Helado" único en Castilla-La Mancha donde se pueden contemplar viejas heladeras a mano, moldes de polos y una de las bicicletas que se empleada para el reparto.

A pesar del haber pasado del obrador a la fábrica la horchata que ofrece “Los Valencianos” en sus tiendas es fresca y natural. En su elaboración no interviene ningún proceso de pasteurización y no emplean conservantes. Se fabrica sólo con chufas “Oro de Alboraya”, agua, azúcar y canela. También ofrecen horchata congelada que sigue el mismo proceso de fabricación que la horchata normal y que tienen dos años de caducidad. Desde aquí propongo que se añadan unas cuantas dosis de estas al equipaje de los primeros colonos a Marte. Seguro que una puesta de sol desde el planeta rojo sorbiendo una horchata hace que el hecho de no regresar a la Tierra se haga mucho más llevadero. ¡Démosles una alegría!

Horchata de Los Valencianos
  
Recuerdos en su interior
  
Uno de los locales de Los Valencianos
  
Horchaterías Los Valencianos-FRANFER

Horchaterías
Calle Feria, 35
Plaza de Benjamín Palencia, 1
Calle Francisco Pizarro, 65
C.C. Vialia (Estación de Albacete-Los Llanos)
Plaza del Altozano, 6

Obrador
Parque Empresarial Campollano, c/E, 62

Localización en mapa de las horchaterías y otros establecimientos que elaboran horchata natural incluidas en la sección ESPECIAL HORCHATA: Me chifla la chufa

viernes, 23 de junio de 2017

Pastelería Casa Hidalgo (Cádiz)

No soy hombre temeroso de Dios y doy fe que mi profesora de religión del colegio lo intentó por todos los medios. La recuerdo enfebrecida leyéndonos en clase las horribles descripciones sobre el infierno de Dante, Wetti o Tundal. No le faltaba interés, esfuerzo y pasión pero tenía un público difícil: los niños criados en el Villaverde de entonces éramos poco impresionables. 

Sabedora del poder persuasivo de la imagen un día apareció con el retroproyector del director para las grandes ocasiones. Sobre el gotelé blanco de la pared nos mostró escenas del Averno de El Bosco concluyendo que era el destino deparado al pecador; pero a nuestros ojos ya era una mejora comparado con el parque de los Pinos de San Cristóbal donde entre otros seres espeluznantes moraba el “camello” bípedo sin joroba.

Pasaron muchos años hasta que encontré una iconografía religiosa aterradora. Fue en tierra de buenas viandas, en Santiago de Compostela y concretamente en la escena del juicio final del Pórtico de la Gloria. 


Cuando contemplé a ese pobre pecador eternamente condenado a tener una soga en el cuello que le impide comerse una empanada, me recorrió un escalofrío por la espina dorsal. Sí, ahí estaba el infierno y en verdad era tan aterrador como había descrito la sita Charo. Desde que tuve esa terrible visión como todas las empanadas gallegas que puedo, para saciar en esta vida terrena las carencias que tendré en la otra vida.

En mi último viaje a Cádiz no pude resistirme a saciar mi apetito, y mi curiosidad, por las empanadas gaditanas de Casa Hidalgo. La responsable de introducir este producto ahí abajo es una gallega, Maruja Louro, pionera de la empanada en Cádiz. Si hoy es un producto común en la ciudad es gracias a ella. Comenzó a elaborarlas en los años sesenta y son el emblema de la pastelería.

Están elaboradas con masa de pan (a mi entender las mejores) y son de diversos tamaños y rellenos: carne, bacalao, caballa o pollo. La empanada de la casa, que no debes dejar de probar, es la individual de bonito elaborada con tronco de atún, pimiento, tomate y cebolla. Te hará sentir como si estuvieras en la misma Plaza del Obradoiro con una banda de gaiteros de música ambiente. Yo si viviera en Cádiz comería las empanadas de Casa Hidalgo todos los días sin medida no sea que el Maestro Mateo tuviera una visión acertada del Averno: un lugar de sufrimiento eterno sin empanadas.

Fachada de la gaditana Casa Hidalgo

Ésto sí que es entrar en el Paraíso...

Las empanadas gallegas de Casa Hidalgo

Plaza de la Catedral, 8
11005 Cádiz

miércoles, 21 de junio de 2017

Heladería Arnoldo (San Sebastián/Donostia)


Me sorprende la gran afición por los helados en la norteña y lluviosa Donosti. Hay más gente portando un helado en el bulevar donostiarra que tipos con peto de “Compro Oro” en la Puerta del Sol de Madrid. De existir un ranking de consumo de helados por habitante en España creo que Donosti estaría muy arriba. No conozco ninguna otra ciudad donde sea tradición de obligado cumplimiento contemplar los fuegos artificiales de sus fiestas comiendo helado. Si los gabachos hubieran regalado a sus vecinos donostiarras la “Estatua de la libertad” en vez de a los neoyorkinos a buen seguro que en el lugar de antorcha habría ahora representado un cucurucho de helado.

Entre tanta heladería sólo me consta una que elabore su propia horchata. La familia Arnoldo vende helados en Donosti desde 1935 cuando Giovanni y Elisa emigraron de Italia. Primero frente a una gasolinera de la playa de Ondarreta, más tarde en la calle Miramar y desde 1948 en la actual sede en la calle Garibai. Hoy dispone de otros dos locales de venta en la calle Easo y la avenida de la Libertad. Elaboran horchata artesana todo el año y por lo que me cuentan tiene su público. Venden dos o tres litros al día en invierno y llegan a los quince litros en verano. Ahora no tienes excusa para disfrutar de todos los encantos de Donosti con una “hortxata de txufa” en la mano.

 La vieja heladera

"Hortxata" 
(palabra no aceptada aún por la Euskaltzaindia)

Cucurucho de helado XL para vascos de pura cepa

Calle Garibai, 2 (sólo venden horchata en esta sede)
Calle Legazpi, 9
20004 San Sebastián/Donostia

Calle Easo, 1
Avenida de la Libertad, 45
20006 San Sebastián/Donostia

Paseo del Muelle, 3
20003 San Sebastián/Donostia

Localización en mapa de las horchaterías y otros establecimientos que elaboran horchata natural incluidas en la sección ESPECIAL HORCHATA: Me chifla la chufa

viernes, 2 de junio de 2017

Mercado Central (Salamanca)

En la salida este de la Plaza Mayor encontramos uno de los edificios más singulares de Salamanca: el del Mercado Central. Se inaugura en 1909 y es obra del arquitecto gaditano Joaquín de Vargas y Aguirre, autor también de la modernista y espectacular Casa Lis, con la que comparte materiales como el hierro, el cristal y el ladrillo aunque no estilo. Un ejercicio de funcionalidad y racionalidad que contrasta con la factura más clásica presente en la mayoría de los monumentos de la ciudad.

El mercado dispone de 54 puestos en los que la carne es la protagonista. Destacan por su crudeza los mostradores de lechazo, tostones y lechones pero mi mirada se dirige hacia los puestos de despojos. Cuatro casquerías en un pequeño mercado acreditan la gran afición de los salmantinos por los callos, lengua, mollejas, manos, pies, sesada y jetas. Productos presentes en la gastronomía local y que puedes disfrutar en la ciudad en forma de tapas y raciones.

Antes de que se prepare un escuadrón suicida de paracaidistas integrado por nutricionistas y/o veganos irredentos para convertir a los salmantinos a la dieta mediterránea a base de alfalfa orgánica ofrezco un dato que dará al traste con la operación: Salamanca es la provincia con mayor esperanza de vida de España. Alguna virtud tendrá su estilo de vida si viven más que los japoneses (ausencia de terremotos aparte). Así que parafraseando no recuerdo muy bien si a Oscar Wilde, Mahatma Gandhi o Mr. Wonderful: si algo funciona, no lo cambies.

 Mercado Central de Salamanca
  
 Uno de los accesos del mercado charro
  
¡Soplaré y soplaré y el mostrador derribaré!

Plaza del Mercado, s/n
37001 Salamanca

miércoles, 24 de mayo de 2017

Cremeria di Vaniglia (Córdoba)


Iniciamos una nueva temporada horchatera… ¡por fin! Dejamos atrás un invierno duro no sólo por la escasez de este manjar debido el fresquito sino porque estos meses algunos gurús nos han bombardeado con las supuestas propiedades dermatológicas de la chufa. Tiene un pase encontrarse chufas en chocolates, patés, licores o aliños pero mi postura sobre desaprovechar tan preciado y escaso producto en cosméticos parafraseando a un ilustre valenciano es: “¡No, hija no!”. ¿Qué  exagero? Piensa en la reacción de un gallego si descubre que parte de la captura de centollos se emplea en fabricar crema exfoliante o de uno de Santoña si supiera que las delicadas anchoas cantábricas se usan como solución a las callosidades de los pies.

Nuestra primera parada de este año es Córdoba. Me traslado a la ciudad del califato a pasar el día con unas amigas. Si mi información no es incorrecta hay tres establecimientos que elaboran horchata de chufa de verdad: Cremeria di Vaniglia, La Flor de Levante y Helados Porras. Al llegar lo primero que hago es situar los hitos en el plano como si fuera el mismísimo general MacArthur horas antes de ocupar Japón. Cuando me dispongo a iniciar la ruta horchatera mis compañeras de viaje me intentan convencer para aprovechar parte de la mañana en conocer la ciudad: la Mezquita, el Alcázar, la Sinagoga… esas cosas. Con la tarde ya encima y sus billetes en mi mochila amenazo con dejarlas en tierra si no tomamos al menos una horchata. ¡Si no, para qué salgo yo de Madrid!

No había tiempo para visitar las tres heladerías así que nos decidimos por Cremeria di Vaniglia. A pesar de la referencia italiana su propietario es natural de la localidad alicantina de Ibi. Pregunto por qué ese nombre y me contesta que la idea era fusionar sabores y recetas tradicionales ibenses con las innovadoras apuestas italianas. La heladería abrió en abril de 2012 aunque su historia se remonta al grupo La Ibense desde 1947. El obrador de Denia elabora el 80 por ciento de sus productos. Además de horchata disponen de helados con homenajes a sabores andaluces como el de tocino de cielo, el pastelón montillano o el pionono. Con ese vaso de horchata recuperé mi carácter bondadoso y mis amigas sus billetes de vuelta. Eso sí, la próxima vez viajo solo o llevo la “Chufamix”.

Una horchata en Córdoba
  
Terraza y local de "Cremeria di Vaniglia"
  
Tan larga espera sin horchata provoca extrañas visiones...
  
Calle José Cruz Conde, 1
14008 Córdoba

Localización en mapa de las horchaterías y otros establecimientos que elaboran horchata natural incluidas en la sección ESPECIAL HORCHATA: Me chifla la chufa