Durante las recientes fiestas de
San Cayetano un bar de El Rastro, popular por sus navajas a la plancha,
rebautizó el bocadillo de chorizo con el nombre de Bárcenas. En "Bar Cruz-La Casa de las Navajas" todavía se cantan
los pedidos a pleno pulmón por lo que esos “bárcenas” debieron provocar no
pocas sonrisas entre la ya de por si animada clientela de los domingos de
mercadillo.
El uso del sustantivo chorizo
para referirse a “los amigos de lo ajeno” parece que tiene su origen en el caló
donde ladrón se dice “chori” y es probable que los payos por asimilación lo
convirtieran en “chorizo”. Hoy esta acepción es tan popular que frases como “no
hay pan para tanto chorizo” están, para nuestra desgracia, completamente vacías
de su original contenido gastronómico.
El diccionario de la RAE reconoce
esta acepción vulgar sólo para “rateros, ladronzuelos y descuideros”, en pocas
palabras, ladrones de poca monta. A la vista del estatus al que pertenecen en
la actualidad los chorizos de los que hoy todo el mundo habla no estaría de más
que la Academia ampliara la definición a Altezas Reales, Excelencias,
Ilustrísimas y Señorías.
Cartel en Bar Cruz durante las fiestas del barrio
Bar Cruz-La Casa de las Navajas
Calle de las Maldonadas, 1
28005 Madrid
No hay comentarios:
Publicar un comentario